Textiles en Plaza Santo Domingo SCLC

Los pueblos indígenas de Chiapas han conservado profundas raíces artísticas ancestrales, especialmente en los textiles, los cuales se pueden encontrar de manera diversa en la Plaza de la Iglesia Santo Domingo ó Plaza 31 de Marzo en la ciudad de San Cristobal de las Casas a 84 Kms de Tuxtla Gutiérrez.

Este trabajo artesanal conecta con el arte milenario de los mayas y lo siguen desarrollando a lo largo de la historia, en algunas regiones con influencias y materiales adoptados del periodo colonial y recreado con diseños indígenas, como el caso de los huipiles de Amatenango, el chal bordado chamula, las blusas tzeltal de Bachajón o tojolabal de Saltillo y, por supuesto, el traje de gala chiapaneco.

En la comunidad de Carranza los artesanos indígenas manufacturan un hermoso brocado, mientras que en Magdalenas sus mujeres confeccionan bellos huipiles en donde se cuenta la historia de sus antepasados.

Mención aparte merecen el arte plumario del traje de boda de las mujeres de Zinacantán, los trajes festivos de Amatenango, los diseños y colorido de Tenejapa, los tejidos ceremoniales de Chamula, la simbología de Chenalhó y los textiles de Cancuc.

En todos esos casos, los artesanos, hombres y mujeres, reafirman su identidad a través de su indumentaria, mucha de la cual reproduce los diseños mayas del periodo clásico.

A lo largo de los siglos, los símbolos y diseños del periodo clásico maya han permanecido y siguen siendo utilizados en los huipiles contemporáneos, aunque los han resignificado de acuerdo con la época, pero sin modificar sus conceptos básicos: el mundo concebido como un rombo con cuatro direcciones o rumbos, como el que aparece en el Dintel 24 de Yaxchilán y en el huipil actual de las mujeres de Larráinzar.

En general, gran parte de los motivos que adornan la indumentaria de los pueblos indígenas de Chiapas se pueden reconocer en la vestimenta de los señores mayas, según se puede ver en los relieves y la escultura prehispánica.

Del mismo modo, las técnicas y diseños del arte textil actual se han conservado gracias a la permanencia de sus conceptos ancestrales: los sueños de las tejedoras, la memoria y devoción de los ancianos, y a la preservación de la indumentaria con la que visten a sus santos, en donde permanentemente recrean su arte textil que renace y florece en cada ciclo histórico fortaleciendo sus raíces. Bien puede afirmarse que en cada diseño tejen su historia mitológica.